Una pinza de freno pintada es un detalle clave para lograr una apariencia armoniosa en tu coche. Puedes pintar la pinza tú mismo y ahorrar dinero. En este artículo descubrirás las distintas técnicas para renovar el aspecto de tus pinzas de freno y los puntos importantes que debes tener en cuenta.
La pinza de freno es un componente que, aunque cumple una función importante, suele estar bastante oculta. Rodea el disco de freno en un punto específico y alberga los pistones y las pastillas. Debido a su ubicación expuesta en la rueda, está constantemente expuesta a condiciones ambientales que la someten a gran estrés. Entre ellas se incluyen:
- Cambios rápidos de temperatura, de frío a calor
- Astillas de piedra
- Sal
- Desgaste de las pastillas y discos de freno
Debido a estos factores, una pinza de freno estándar, sin pintar, puede verse rápidamente bastante deteriorada en coches de segunda mano. Sin embargo, dado que es un componente de hierro fundido, no hay que dejarse llevar por su apariencia: aunque esté oxidada o muy sucia, esto no afecta su funcionalidad. La pinza de freno es una pieza que generalmente está oculta por llantas de acero cerradas o una cubierta sólida de rueda, por lo que no es estrictamente necesario pintarla.
Sin embargo, quienes buscan personalizar su vehículo a menudo optan por darle un toque más deportivo y dinámico. Para lograrlo, eligen llantas de aluminio de diseño ligero con neumáticos de perfil bajo y, a menudo, discos de freno perforados. Los discos de freno siempre mantienen un aspecto limpio y brillante, ya que se desgastan ligeramente con cada frenada. En esta configuración, las pinzas de freno se vuelven visibles. Y una pinza de color negro grisáceo, sucia y oxidada, ciertamente desentonaría con el resto del coche. Por eso, pintar las pinzas de freno es una parte clave de la personalización estética.
¿Qué dicen los fabricantes?
Brembo, uno de los fabricantes más reconocidos de frenos deportivos, desaconseja encarecidamente pintar las pinzas de freno. Como fabricante, tiene razones muy válidas para ello, entre las que se incluyen:
- Seguridad de los productos
- Prevención de la falsificación
- Eficiencia de la pinza de freno
- Garantía original
En general, las pinzas de freno Brembo no necesitan ser pintadas, ya que vienen de fábrica con una capa de pintura resistente al calor y fácil de limpiar. Por lo tanto, en el caso de los frenos retrofit de los mejores fabricantes, estamos de acuerdo con las críticas sobre la pintura. Es fácil caer en la trampa de un producto falsificado, robado o mal restaurado. Sin embargo, en el caso de las pinzas de freno estándar, nada impide mejorar su apariencia de manera sutil, siempre y cuando se haga de forma adecuada.
¿Quitar o no quitar?
La mayoría de las guías de bricolaje sobre la pintura de las pinzas de freno explican cómo hacerlo con las pinzas instaladas. Nosotros decimos: depende de lo que quieras lograr. Si te basta con una apariencia superficial de la pinza pintada, el método rápido está bien. Pero si eres detallista y tienes altos estándares de calidad, las pinzas instaladas no son la mejor opción. No se puede limpiar ni, sobre todo, alisar una pinza de freno instalada con la misma precisión que una desmontada. Además, si la pinza vieja está cubierta de óxido, pintarla no cambiará su textura rugosa y el resultado será más bien mediocre. Aun así, describiremos ambos métodos.
¡Pinta siempre con pintura para pinzas de freno!
Ya sea que decidas pintar la pinza de freno instalada o desmontada, es fundamental usar la pintura adecuada. Solo la pintura específica para pinzas de freno tiene las propiedades técnicas necesarias, como resistencia al calor, elasticidad, resistencia al impacto de piedras, abrasión y sal. La pintura para coches o para radiadores no ofrece estas características. Para que quede claro: no usar pintura homologada para pinzas de freno pone en riesgo tu seguridad al conducir. Afortunadamente, la pintura para pinzas de freno no es cara y solo necesitarás una pequeña cantidad.
La variante sencilla: pintar la pinza de freno instalada
Lo primero que debes hacer es elegir la pintura adecuada para las pinzas de freno. Los kits ofrecidos por marcas como Foliatec, Paintsystems o Raid incluyen:
- Limpiador especial para frenos
- Cepillo de alambre
- Pintura 2K (color + endurecedor)
- Brocha de pintura
- Guantes
Es importante tener en cuenta que para pintar las pinzas de freno cuando están montadas, solo se recomienda el uso de pincel. Además de ahorrarte la tediosa tarea de enmascarar, es mucho más barato y seguro. En los frenos, nada, incluida la pintura, debe ir donde no debe. Si usas un aerosol, podrías obstruir rápidamente el sensor ABS, atascar los pistones de freno o hacer que las pastillas de freno pierdan eficacia. Puedes evitar estos problemas utilizando un pincel para pintar la pinza de freno.
Paso 1: Poner el coche en un soporte
Aunque no necesites tumbarte debajo del coche para pintar la pinza de freno, es fundamental levantarlo siempre de forma correcta y segura. El gato hidráulico no es suficiente para esto. Utiliza soportes profesionales para automóviles, los cuales están disponibles a partir de 25 euros el par.
Cuando levantes el coche, asegúrate de que el soporte esté colocado en el lugar adecuado de la carrocería, tanto al levantarlo como al bajarlo. Un punto de elevación mal colocado puede, en el peor de los casos, dañar todo el chasis.
Antes de levantar el coche, afloja las tuercas de las ruedas. Esto te ahorrará mucho trabajo más adelante.
Paso 2: Retirar la rueda
Como ya aflojaste las tuercas de las ruedas antes de levantar el coche, el desmontaje será mucho más fácil. Coloca la rueda en un lugar seguro para evitar que pueda rodar.
Paso 3: Limpiar la pinza de freno
Primero hay que limpiar todo el área del freno, enjuagándolo a fondo con limpiador de frenos. Luego, usa el cepillo de alambre y el limpiador para frotar la pinza de freno hasta eliminar el óxido y la pintura residual. Tómate tu tiempo para hacer una limpieza detallada y minuciosa. Recuerda, no utilices máquinas para esto; trabaja con cuidado y de manera manual con el cepillo.
Paso 4: Enmascaramiento
Dependiendo de lo firme que sea tu mano, es posible que puedas prescindir del enmascaramiento. Sin embargo, para mayor seguridad, cubre el disco de freno con dos tiras de cinta adhesiva, una por encima y otra por debajo de la pinza. De esta forma, evitarás ensuciar los discos de freno con pintura.
Paso 5: Pintar la pinza de freno
Es el momento de pintar la pinza de freno. Aplica la pintura trabajando de arriba hacia abajo, utilizando pequeñas pinceladas y con poca pintura. Intenta seguir un patrón «entrecruzado» para lograr la mejor cobertura. Retira los excesos de pintura inmediatamente y cubre cada orificio. Recuerda, al pintar las pinzas de freno, asegúrate de que la pintura no entre en contacto con el disco de freno, las pastillas o las mangueras. ¡Bajo ninguna circunstancia pintes las pastillas de freno!
Paso 6: Dejar que la pintura se seque
Después de aplicar la pintura en las pinzas de freno, es importante dejarlas secar. Sigue las instrucciones de tu kit de pintura de frenos para saber el tiempo de secado recomendado.
Si no estás satisfecho con el resultado, puedes aplicar una segunda capa de pintura para pinzas de freno.
Pintar la pinza de freno desmontada
Pintar las pinzas de freno es relativamente sencillo cuando están instaladas, pero hacerlo con las pinzas desmontadas requiere un poco más de conocimiento. La pinza de freno es una parte esencial del sistema de frenado, conectada tanto mecánica como hidráulicamente al vehículo. Para desmontar la pinza, será necesario desconectarla de la manguera de freno. No obstante, esta es también una excelente oportunidad para revisar el estado de los pistones de freno y la calidad del líquido de frenos.
Lo primero que hay que hacer es limpiar bien la pinza de freno. Al estar desmontada, ahora puedes trabajar con mayor precisión, lo que mejorará el resultado final. Lo más importante es que ahora tienes la oportunidad de lijar correctamente la pinza. Utiliza solo papel de lija y hazlo a mano, así evitarás quitar demasiado material y conseguirás un acabado uniforme y agradable. ¡Nunca uses masilla antes de pintar la pinza de freno! Esto podría comprometer la seguridad vial. Solo debes usar el papel de lija para crear una base adecuada para la pintura de la pinza.
Después de lijar, es necesario limpiar nuevamente la pinza de freno. Para ello, vuelve a usar el limpiador de frenos y asegúrate de eliminar todo el polvo de lijado. Una vez que la pinza esté completamente limpia y el limpiador de frenos se haya secado, puedes comenzar a pintarla. Esto evitará que se forme óxido nuevamente. Ahora puedes pintar las pinzas siguiendo el proceso descrito anteriormente. Al montar la pinza de freno, no olvides purgar el sistema de frenos para garantizar que todo funcione correctamente.
Pintar las pinzas de freno por ti mismo: una excelente forma de ahorrar dinero
Dependiendo del taller, pintar las pinzas de freno puede costar varios cientos de euros. Sin embargo, los kits de pintura suelen tener un precio inferior a los 25 euros. Si decides pintar tú mismo las pinzas de freno, podrás ahorrar una cantidad significativa de dinero.